Por Manuel Saúl Reyna Macías Es difícil no verlo, es aún más complicado no escucharlo. Incluso, para algunos es difícil no temerle. Siempre está ahí. Sentado en la fuente de los sensatos, ignorando la fauna urbana que pasa alrededor de él; ignora a aquellos patinadores insulsos que buscan la plaza como piso y como un …
