Por Alma Andrea García Zavala
¡Oh! Esclavos del propio depredador,
en medio de una jaula sin sujeto…
La conciencia despierta es el soneto,
del círculo concéntrico y la flor…
Sin embargo el poema del ser es.
Integra el plan divino del Espíritu…
Somos el amor: en cuerpo, alma y espíritu…
Desandar no es caminar sin los pies.
Versar sin verdad y sin sentimiento:
la guerra es angustia por el amor,
camino no es camino si es violento.
¡Ah! Del misterio del amor divino:
infinito poema espiritual…
Fuera de la tinta: ¡canta en el vino!
